Es un evento de e-commerce que se organiza todos los años, no solo en Argentina. Tiene una logística aplicada como cualquier tipo de evento presencial. Dejando de lado la problemática de los precios, las acciones que realizan no solo están emparentadas con las ventas sino con la publicidad. Por eso se necesitan relacionistas públicos para «responder» a la catarata de preguntas, muchas veces no relacionadas con las compras, y el manejo de redes sociales para no perder «clientes» y fidelizar a nuevos compradores.